La tradicional foto de recuerdo de boda de Natya Gracheva y Anton Sokolov no se tomó frente a una torta de bodas de varios pisos, entre los invitados que vitoreaban, sino entre los escombros de Járkov, en Ucrania.
Ella, con vestido blanco, sin renunciar al velo y al ramo, pero con botas militares. Igual que él, con un impecable traje gris oscuro.
Natya y Anton, inmortalizaron su momento de “recién casados”, abrazados sobre el techo de un coche destruido por las bombas arrojadas por Rusia, en una calle de su ciudad.
O mejor dicho, de que lo que queda de ella: destrucción por todas partes, los desvanes de los edificios hechos pedazos y ventanas destrozadas.
La pareja era médica antes del estallido de la guerra en Ucrania, pero desde entonces se han convertido en voluntarios y brindan atención médica gratuita a quienes la necesitan.
Se informa que cuando se quedaron sin suministros médicos, comenzaron a recolectar dinero y comprar medicamentos para los residentes de la ciudad que necesitaban tratamiento.