Boca alcanzó las semifinales de la Copa Argentina en las que enfrentará a Patronato, de Paraná (que este miércoles truncó la posibilidad de un nuevo superclásico en esta competencia al eliminar a River), al vencer en un partido que empezó el miércoles y terminó el jueves a Quilmes, por 3 a 2, en el estadio Malvinas Argentinas, de Mendoza.
A Boca lo sorprendió la propuesta ofensiva de Quilmes, que salió decidido a apropiarse de la mitad de la cancha, y mucho más cuando apenas consumidos cuatro minutos ya los “cerveceros” se pusieron en ventaja con un golazo de Julián Bonetto.
Pero muy poco le duró la alegría a los quilmeños, porque apenas siete minutos después Darío Benedetto aprovechó una pelota rebotada en el borde derecho del área chica y su momento angelado en el que todos los balones le caen a él, para empatar el partido con un derechazo cruzado.
Pero cuando mejor estaban los de la Primera Nacional se proyectó Agustín Sández, se resbaló Rafael Barrios y el lateral izquierdo, que luego sufrió una contractura en el posterior del muslo derecho y debió salir en el entretiempo reemplazado por otro juvenil como Nahuel Genéz, colocó un centro bajo al medio del área chica que el también pibe (19 años) Gonzalo Morales envió sin marca a la red para su primer tanto en primera.
Otro juvenil de alta proyección como Luca Langoni (19 años) ingresó por un agotado Benedetto y apenas 180 segundos después marcó el tercer tanto “xeneize” y el quinto de su cosecha personal en la primera de Boca en 12 encuentros, en los que en su mayoría no fue titular.
Mariano Pavone, antes de los 10 de pisar el césped del Malvinas Argentinas logró el descuento para señalar el tanto 208 de su carrera y transformarse en uno de los “top ten” argentinos con más goles convertidos todavía en actividad.
Un grupo de hinchas quilmeños comenzaron a lanzar todo tipo de proyectiles contra otros de Boca que estaban en la tribuna contigua, en una zona donde no había efectivos de seguridad que dividieran a ambas parcialidades.
Los incidentes se prolongaron por más de un cuarto de hora (exactamente 17 minutos) y en ese lapso la intervención policial fue importante para ir calmando de a poco a los más exaltados, mientras que el jefe de seguridad de Quilmes, Pablo Otero, por ir a convencer a los hinchas de su club de que depusieran esa actitud hostil terminó recibiendo un proyectil que le provocó un corte sangrante en el cuero cabelludo.
Una mujer hincha de Boca Juniors falleció hoy y más de una veintena resultaron lesionados, de los cuales nueve quedaban esta tarde hospitalizados en distintos centros asistenciales, por un accidente en el cual volcó el micro que los llevaba hacia Mendoza. El accidente se produjo sobre la Ruta Nacional 7, a 40 kilómetros de la capital mendocina, a la altura de la ciudad de San Martín, frente al autódromo de esa ciudad, señalaron fuentes oficiales a Télam.