Con un fuerte discurso, el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, ratificó hoy que el gobierno provincial no está involucrado en el caso por la desaparición del niño Loan Daniel Peña (5), al señalar que no tienen “nada que ver” y le apuntó a “algunos caranchos de la política” que buscan “lastimar” a su gestión.
“Tratan de desestabilizar a la provincia de Corrientes”, lanzó en conferencia de prensa desde la capital provincial, tras oficializar el recambio de las jefaturas policiales. Y rechazó a quienes buscan involucrar a la gestión provincial con el hecho. “No tenemos nada que ver, como pretenden instalar algunos caranchos de la política”, expresó y le habló al pueblo correntino: “Les pido que tengan la confianza en su gobierno”.
Con un discurso duro, el gobernador destacó que se “buscan adelantar las elecciones provinciales”, y defendió la actuación de las autoridades locales. “Somos los que denunciamos un delito federal, porque encontramos pistas de que el menor fue sustraído o involucrado en la trata de personas”, apuntó.
“Pretenden acusar al gobierno provincial como si estuviéramos sentados en esa mesa de 9 de julio”, sentenció el gobernador, en referencia de la conocida foto de la familia de Loan, en la que aparecen varios de los detenidos e imputados en la causa.
Ayer, el gobierno provincial tomó la decisión de decapitar la cuestionada Policía de Corrientes, a la que la jueza federal de Goya, Cristina Pozzer Penzo, corrió el caso a pocos días de hacerse cargo del expediente. Fue luego de que explotara el escándalo por la declaración de madrugada de Laudelina Peña con la versión del accidente ante un fiscal que no era el natural del caso, ni siquiera del fuero que interviene.