Un nuevo emprendimiento se lanzó de lleno en la ciudad de Posadas y tras éste el desafío de romper el molde y animarse a que los amantes de la carne, en lo que refiere a gourmet, apuesten por algo distinto.
En ese sentido, el Almacén de Carnes Magron puede atarse a un concepto más que oportuno: ‘metió toda la carne en el asador’ para conquistar a un nuevo público.
Matías Husulak, uno de los propietarios del comercio ubicado en el corazón del barrio Villa Sarita (Alberdi y Pedernera), dio más detalles de esta propuesta innovadora y señaló que “cuando planteamos este proyecto la idea fue ofrecer un concepto distinto, encontramos la palabra almacén para darle otra impronta”.
En diálogo con Todo puede pasar por Circus 104.9, deslizó que esa “mixtura de conceptos se usa” y “nos merecíamos” los posadeños esa simbiosis de barrio y lo premium, que “incrementan el valor de un emprendimiento”. Agregó que el negocio “es una carnicería que la transformamos en un almacén” y pusieron énfasis en el “valor emocional y estético que le dimos al lugar, la presencia, el servicio, la higiene, eso es lo que pasa de una carnicería a un almacén, a nuestro querido Magrón”. A la hora de repasar con qué se va a encontrar el consumidor, contó que “ofrecemos algo distinto, algo que la sociedad se merece” y citó que además de los cortes convencionales, desde el asado a los demás, incorporan nuevos, que “se imponen”.
Entre ellos mencionó que una de las estrellas es el “tomajok o tibón, cortes que empezaron en Estados Unidos; el tomajok parece un hacha, está compuesto por un ojo de bife con una porción de costilla”, esgrimió. Sobre ello, añadió que “la magia de estos cortes es comer dos músculos de carne en un mismo plato, es súper interesante a nivel paladar, hasta depende el corte podés dar un bocado de cada uno”. Consultado por los valores, relató que “estos cortes son más costosos por cómo se cortan las medias reses, hoy tenemos el kilo a 950 pesos, pero hablás de un corte que tenés 1 kilo, 1,200 kilos, para dos personas tranquilamente”.
Si bien hay buenas expectativas, Husulak contó que fue muy difícil incorporar esta manera de ofrecer la carne, que fue un espaldarazo su gusto por la gastronomía y confió que cuentan con más oferta, como implementar la mezcla de dos o más carnes, “logramos hacer unos cubitos de carne, vuelan cada vez que se hacen. Son cubitos con cuadril, nalga y cordoncito de lomo, un sabor impresionante”. Sobre esta opción agregó que facilita hacer empanadas cortadas a cuchillo, y recalcó otra vez en que el consumidor “se merece” ese servicio, carnes distintas, para que faciliten la hora de cocinar. También mencionó el tibón (bife de chorizo y lomo), un corte más ancho más parrillero que “permite a la gente innovar en las parrillas tan clásicas”.
Por otro lado, remarcó que apuntan a implementar la marca, que lo conozca la gente, y posteriormente acceder a otros barrios, agregó que trabajamos con productores de la zona y previo a lanzarse al baile “recorrimos muchos lugares, leímos mucho sobre el tema y nos asesoramos con allegados”.
También cuentan con bebidas, picadas, carbón, entre otras opciones, un oferta “completa”, cerró Husulak.