Más allá de alguna inquietud acerca de qué decisión iba a tomar el gobierno argentino, era lógica la extensión de la medida que mantiene cerradas las fronteras –hasta el 12 de marzo- con los países vecinos debido a que el Covid no da tregua. En más de una ocasión, desde el lado paraguayo –vecino con la Posadas- se manifestaron a favor de que se habilite otra vez con argumentos, entre ellos uno que inclina la balanza en el país vecino: el sector comercial.
Sobre ello se refirió Rolando Goiburú, cónsul paraguayo en Posadas, en diálogo con Todo puede pasar por Circus 104.9. Mencionó que hablan con familiares de ciudadanos paraguayos en Argentina que “quieren regresar a sus hogares, ver sus bienes, revisar impuestos” y que si bien ese grupo no es el 90 por ciento de la sociedad, “hay diferentes inquietudes y al cumplirse casi un año del cierre del puente, es importante revisar lo que se puede hacer para solucionar los problemas de la población, que en fin es lo que necesita”.
Goiburú reflexionó que ““era impensable que ocurriera este evento en el mundo, tan tedioso, horrible”; entendió que “vamos aprendiendo por el camino y es un obstáculo más que debemos salvar para seguir existiendo como sociedades humanas. Forma parte de un aprendizaje importante”.
Respecto de uno de los principales puntos que unen a Posadas con Encarnación, esto es el comercio, acotó que “siempre las cuestiones comerciales preocupan”, porque “hay un intercambio bastante importante, somos miembros del Mercosur, formamos parte de un grupo económico de América Latina y eso es lo que inquieta”. Agregó que a pesar de que hay un “flujo importante” de importación y exportación, no deja “de inquietar a la gente los movimientos comerciales que se dan entre todos los países”.
Consultado por el presente sanitario en Encarnación, señaló que los valores “están parecidos a Misiones, por momentos suben más los focos de infecciones pero no hay diferencias sustanciales”.
Luego, no se animó a aventurar sobre qué pasará después del 12 de marzo, por ello fue cauto e indicó que “nuestras autoridades superiores se encargaron a través de las cancillerías (de dialogar), eso es el curso que debe seguirse, siempre respetando las decisiones soberanas de cada país hermano”.
A pesar de ello confió que “estamos expectantes, esperando las decisiones soberanas del gobierno argentino; estamos esperanzados de iniciar un camino de reapertura” y para que no queden dudas subrayó: “Es el deseo íntimo que tenemos y es lícito expresarlo. No podemos negar el deseo de muchísima gente, porque desfilan los compatriotas de ambas márgenes con la felicidad de ir y venir o retornar a sus hogares”.
Por último, remarcó que durante la pandemia todos sintieron las consecuencias, entre ellos los argentinos que tienen actividad en suelo paraguayo: “Hay muchos trabajadores que quedaron en stand by, dueños de empresas, de bienes raíces, a la espera siempre de poder cruzar”.