El 7 de abril también celebramos el día mundial de la Salud, y como Aire por favor tiene su Google de la Salud hablamos con la Lic. en Nutrición Jennifer Zimmermann que nos ayuda a comprender y manejar algunos tips para lograr una alimentación saludable y también a derribar algunos mitos.
“Solemos escuchar “el clima amerita”, desde ahí tenemos ese aspecto social que indudablemente afecta a nuestro arte culinario, nuestro comer en Misiones; llueve y seguro surge reviro o chipa. Entonces cuando decimos que debemos tener una alimentación saludable también se hace referencia a la connotación cultural y social que tenemos del lugar. De ahí el gran desafío que transitamos, aprender a comer saludable en Misiones con toda esa impronta que tenemos del almidón y de las masas”, argumentó Jennifer.
Se está trabajando con turismo desde el Colegio de Nutricionistas donde buscamos, desde la biodiversidad que tiene Misiones, sin prohibir estos alimentos que nos gustan y ofrecer a los turistas en espacios gastronómicos de los parques provinciales, una carta con opción saludable. Contemplar, además, a los turistas hipertensos o diabéticos en los menús.
Con el lanzamiento de la ley de etiquetado se busca a que más municipios se sumen, Iguazú por ejemplo adhiere a este proyecto, la idea es alentar a los gastronómicos a tener una opción saludable y asesorar para que puedan brindar esa atención. “Si tu entrada es mandioca frita, acompañar el plato con ensalada, que haya fibras en esa alimentación, que esa persona encuentre un equilibrio en el menú”, ejemplificó Jennifer.
Además, la nutricionista agrega que, “uno de los objetivos de una alimentación saludable, es llegar a cada comida sin hambre, porque eso va a permitir efectivamente que yo coma a conciencia. Si después de comer necesitas dormir una siesta, es porque ya no llega sangre al cerebro, esa sangre tiene que ir directo al sistema digestivo para metabolizar todo ese alimento, esa fiaca que nos da es porque comimos de más; termogénesis inducida por los alimentos se llama, para ser más técnicos”. En ese sentido nos aclara quesi logramos implementar una alimentación equilibrada y saludable no existe el permitido, porque con ello no debería haber prohibidos.
Para finalizar y teniendo en cuenta que se acerca Semana Santa, Jennifer manifiesta que la idea es poder comer lo que queramos, sin culpa en las fechas de festividades, siempre y cuando durante el año llevemos el hábito de una alimentación saludable, 80% saludable y el resto puede no ser saludable.