Cada vez que hay un evento puntual, el sector gastronómico se muestra expectante y recurre a alguna carta para mejorar los ingresos, debilitados por la pandemia. En ese marco, se espera el visto bueno para que se extiendan los horarios de atención este fin de semana, fecha en que se celebra el Día del Amigo.
Sobre ello, Gustavo Pona, gerente del tradicional restaurante La Ruedita de la capital provincial, consideró que será una gran ayuda a todos, a toda la franja de la provincia la ampliación horaria. “Siempre hubo buenas charlas con el municipio y creo que va a haber algo positivo el fin de semana”, evaluó acerca de la decisión del Ejecutivo municipal que se conocería mañana.
Pona sugirió que “venimos haciendo las cosas bien” y que viernes, sábado y domingo trabajan hasta las 23; por ser un día especial se pidió trabajar hasta las 0 del domingo y el lunes llegar con el servicio a la noche. “No es nada exorbitante, es lógico, creo que la gente se va a juntar igual, lo vemos con una colaboración; y también para aquel que pueda salir con amigos”, describió.
Coincidió en que ayudará a desactivar reuniones clandestinas, “haciendo esto la gente va a salir a bares y restaurantes y va a haber más control, es mejor”.
Sobre el presente del rubro, señaló que “está todo muy difícil, es día a día, uno va trabajando y juntando para pagar al personal, al proveedor y qué aportarle al Estado. La capacidad bajó muchísimo, estamos a un 35%, 40%. Si antes era difícil, ahora es un poco más”.
Añadió que con el gobierno provincial “vamos a seguir trabajando en conjunto, es prueba y error” y aconsejó: “Cuanto mejor hagamos las cosas, más rápido vamos a salir”.
Sobre esta nueva normalidad, Pona observó que “el cliente se está acostumbrando, hacen reservas” y aclaró que se permiten mesas de cinco personas el domingo, como previa al Día del Amigo.