El músico y productor Fabián Andrés González, habló en Circus 104.9.
Fue en el programa Quién Dijo? (lun a vie 15h) donde nos habló acerca de sus últimos trabajos, pero no escapó a hablar de su historia.
Más conocido como Tweety González es uno de los músicos y productores más importantes de Argentina. Trabajó como músico Soda Stereo desde 1990 hasta el final de la carrera de la banda. Y luego en su regreso en 2007.
El CV de Tweety es sin dudas uno de los más envidiables que se pueda tener, vendría a ser como nuestro Butch Vig o Nile Rodgers. Ya que ha trabajado con los más grandes. Entre los que podemos destacar a: Los Tipitos, Ximena Sariñana, Emmanuel Horvilleur, Mole, Richard Coleman, Hamacas al Río, Fabiana Cantilo, Ojas, Ulises Butrón, Kevin Johansen, Zero Kill, Viuda e Hijas de Roque Enroll, Spinetta y los Socios del Desierto y Fito Páez, donde obvimante se destaca ‘El amor después del amor’.
“A los 15 años ya iba al colegio de noche para poder estudiar música de día. Después tuve la suerte que a los 18 años comencé a trabajar profesionalmente y no paré. O sea que empecé muy de chico a vivir de, por y para la música”, comenta sobre los inicios en esta aventura, que lo tiene ganándose la vida desde hace casi 4 décadas.
Si bien ‘Una pregunta más’, su single más reciente junto con Lisandro Aristimuño fue uno de los temas centrales de nuestra conversación, ya nos “espoileó” lo que se viene. Se llama ‘Flasheando una cualquiera’ y es un trabajo junto a la guionista, actriz y gestora cultural Maia Tarcic.
Sobre eso comenta: “Ella no viene del palo de la música, sino las artes audiovisuales, escribe muy bien y además canta que no era su fuerte y ahora somos una máquina de hacer canciones juntos”, luego agrega: “Va a terminar en un compilado y un show llamado ‘Twitín Club’.”
“Mi vida es hacer música, grabar, crear y juntarme con gente que me copa y también hacer discos por oficio. Uno es profesional de esto y muchas veces hace discos por profesión, no porque sea un disco que a vos te lo comprarías. Es medio hipócrita, porque uno si quiere vivir de producir discos, es medio difícil“, confiesa.
Pasen y lean (o escuchen) con una de las mentes musicales más importantes de nuestro país
“Yo vengo al estudio, todos los días que puedo, sábados incluso; no vengo los domingos como para extrañar un poco. Pero me encanta, vivo a 8 cuadras del estudio a propósito.
Tengo mi sello discográfico Twitín Records, que no es negocio, es un gusto personal de editar discos que a mí me gustan, que la gente se entere que existen y yo disfruto mucho el viaje de hacer discos más que el resultado. Y después si el resultado del disco es que se escuche mucho, bienvenido”. Es lo primero que nos cuenta.
La música como combustible: “Y mirá, no me fijo tanto, para mí es muy natural, yo empecé muy chico como te dije (NdR: A los 18 años ya lo hacía de manera profesional) y las cosas quizás se acumulan con el tiempo digamos. Después de 35 casi 40 años de estar en ésto, si, me siento parte, pero también me siento fan. Nunca dejé de ser fan. Y yo me siento fan de un artista nuevo cuando aparece, como cuando me puse super fan de Serú Girán a los 15 años. No me cambia el fantatismo por la música por más que sea un profesional y puedo hablar de igual a igual con cualquiera. Si me gusta el artista tengo esa parte fan que también es un poco el combustible.
Ese asunto de Aristimuño: “El proceso fue una base electrónica que venía trabajando y después el año pasado con el tema de la cuarentena que nos encerramos y que el estudio estuvo cerrado 4 meses, un poco tenía eso en casa. Un set muy chiquito y me puse a avanzar más seriamente con los temas. Después se los pasé a uno de los artistas del sello que es Tuten Mapu, con él redondeamos la melodía, se lo mostré a Lisandro (Aristimuño) y le super gustó.”
Una y otra pregunta más: “Lisandro le puso la letra y cantó, también le puso algunas guitarras. Que un tipo como Lisandro te diga que la música está super impecable, yo le pongo la letra y te lo canto para mí es más importante y más valor que ganarme un Grammy.
Un poco cuando voy perfilando las canciones, por lo menos en esa etapa, ya me imaginaba con quien me gustaría colaborar y a quien llamar, tengo muchos amigos.”
De LPs y singles: “El álbum en algún momento fue un invento comercial, después se romantizó y le dimos una excusa artífica. Pero eso fue el tipo de una compañía que en vez de venderte una canción por 1 dólar, te vendemos 10 por 10 dólares. Porque los primeros discos de los Beatles eran compilados de sus hits + 2 temas nuevos. Después empezó, a fines de los 60s empezó el álbum conceptual.”
Más ‘Y’, menos ‘O’: “Yo convivo con las dos cosas. Estoy en un punto en mi vida que la letra ‘O’ no la uso. Para mí es todo ‘Y’; ‘ésto y lo otro’, nada anula nada, todo puede convivir.
Y en todo, hasta te lo digo políticamente. Me parece que éste país se zarpó de las ‘o’. River o Boca, K o antiK, Soda o Los Redondos. Basta de esa boludez ¿por qué no ‘Y’?. ‘Y’ es unión, la letra ‘O’ separa, es textual.”
La pregunta ‘QD?’: Si te encontraras con el Tweety adolescente ¿qué le dirías?: “Yyyyy… ‘con el diario del lunes’ le diría: ‘Metele que está todo bien’ (risas). Pero es como que le haría trampa porque vengo del futuro, voy al pasado y ya sé los resultados. Metele y que te caguen menos quizás.”
Tweety González en Internet:
Soundcloud: Twitín Records
Spotify: Twitín Records
Youtube: Twitín Records
Instagram: Twitín Records
Facebook: Twitín Records
(Por: Ale Ojeda para Circus y GenteConOnda.com)
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