El gobernador Gustavo Valdés ayer denunció a la Prefectura General Naval de Paraguay ante el Gobierno nacional, la Cancillería Argentina y el Ministerio de Seguridad tras un incidente ocurrido en Ituzaingó en la zona de Punta Ñaró, donde efectivos del vecino país abordaron a una embarcación de pescadores correntinos, con intención de detenerlos en aguas y territorio nacional, en lo que significa “una agresión a la soberanía argentina”.
Ante los hechos, el mandatario provincial convocó ayer a una conferencia de prensa donde expuso los hechos con videos del momento del incidente haciendo hincapié en la “gran preocupación” que genera lo ocurrido en inmediaciones de las islas Apipé Grande, Apipé Chico y San Martín, en Punta Ñaró”.
“Recibimos información de una zona de aguas jurisdiccionales de Argentina, donde fueron abordados ciudadanos argentinos, que se encontraban pescando, por fuerzas militares de la Marinería paraguaya, decomisando su equipamiento en costas argentinas, solicitando el pedido de navegabilidad del río Paraná, bajo apercibimiento de llevar detenidos a los mismos”, relató. “Esto no se dio nunca en la zona, y vemos el riesgo de la navegabilidad del río Paraná, por lo que se trata de una agresión a la soberanía argentina respecto de sus límites y a la provincia de Corrientes, en cuanto a su jurisdicción respecto de sus recursos naturales”, reprochó.
En su relato remarcó que los militares paraguayos “portaban armas de fuego” intimidando a los ciudadanos oriundos de Ituzaingó, a la vez que detalló que, desde el lugar de los hechos, “la distancia al primer pueblo paraguayo es de 34 km, y esto se produce frente a las costas de Ituzaingó, Corrientes, sobre la zona donde estamos construyendo el Puerto”.
Siguiendo, el titular del Ejecutivo provincial informó que, ante lo sucedido, tomó contacto “inmediatamente” con el presidente Alberto Fernández, el canciller Santiago Cafiero y el ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández “para poner en conocimiento estos hechos para una pertinente denuncia de vulneración”, debido a que se trata de un “incidente internacional”.
En este marco, el Gobernador solicitó “el aprovechamiento común” de la zona con “los hermanos paraguayos, para una libre convivencia”, y que se cumplan los tratados internacionales para navegar libremente el río Paraná. “Pedimos que tomen dimensión del problema que está habiendo en ese lugar, y que esto se agote mediante reuniones bilaterales, y no se amedrente más a las embarcaciones, por lo que decidimos no permanecer callados”, alertó Valdés.