La pandemia deparó como efecto colateral dos cosas: ante el desconocimiento, los consumidores comenzaron a stockearse; y a raíz de ello, al principio hubo especulación acerca de la falta de algunos productos. Si bien esto último se dio en menor medida, el titular de Defensa del Consumidor en Misiones, Alejandro Garzón Maceda, resaltó que lo que hubo en estos tres meses de cuarentena “fue un aumento de las denuncias de incumplimniento de las cosas que se compraron por internet”, a pesar de que aclaró que han tenido “como es normal” un “80 por ciento de denuncias respecto de los precios de almacén”. Sin embargo, prosiguió, desde marzo “hasta acá llevamos hechas casi 89 actuaciones en toda la provincia, pero son verificaciones no imcumplimientos”. Durante la charla con Ahora o Nunca por Circus 104.9, Garzón Maceda señaló que “hay que reconocer la parte buena, en todos los supermercados, en las distribuidoras, no encontramos especulación de productos guardados. Que el comercio diga ‘no tengo harina’ y la tenía guardada en el galpón. Hay que destacar que mantuvieron abastecimiento de los productos”. Luego hizo un párrafo aparte para destacar que “otra cuestión distinta es el precio, cuando nos decían que aumentó el precio es porque lo hizo el productor, entonces seguíamos la cadena de comercialización. Hay que destacar eso, darle la derecha cuando cumplen las cosas”. Rápidamente se filtró la consulta sobre las dificultades para controlar los precios, situación en la que se encargó de aclarar que estuvieron de forma continua todo este tiempo abocados a las tareas: “Desde marzo estuvimos en la calle todos los días, a veces no estamos en los aplausos, pero trabajamos todos los días, porque los comercios abrieron todos los días. Eso nos llevó a informar que un proveedor de aceite estaba mandando lista de precios con aumentos no autorizados. Se hizo una trazabilidad de todos los productos”. Por otro lado, resaltó que lo que se produjo fue un cambio de marcas, “en lugar de hacer aceite H, se produjo aceite A. Pero es un precio de referencia, entonces vemos cómo llegás a ese precio. Y ahí se acaba la discusión”. Acto seguido puso énfasis en que “el gobierno de la Provincia puso los recursos y se tuvo controlada la cuestión. Estamos tratando de contener, pero no pisarlos. Porque si hay aumento no podés obligar a que (el comercio) venda a pérdida, pero si hay aumento, que esté justificado”. Garzón Maceda también fue práctico para diferenciar entre lo que es caro y lo que consideran desmesurado para el bolsillo del consumidor. “Caro está fuera del poder adquisitivo, abusivo tiene que ver con el precio que le sale al comerciante y a qué precio lo vende. Estamos buscando no lo caro, sino lo abusivo”, ejemplificó. Por último se refirió a un producto como el huevo, después de que en varios puntos se destaque el faltante. “Por lo del huevo hay pocos proveedores, son locales. Y cuando se le acaba, se acaba. Encima hay poca producción. Hubo un precio medianamente pisado, pero no hay muchas alternativas, es cuestión de pasar la crisis”.