La inflación marcó su punto más crítico con los datos brindados por el Indec el último jueves. El índice arrojó 7,4 por ciento para julio, la cifra más alta en los últimos 20 años, algo que indica por qué hoy hay una suba constante de precios y tanto vendedores como consumidores se ven en figuritas para contrarrestar.
Un comerciante posadeño se refirió al escenario económico en el cual contó su realidad. “Lo que guardás y no vendés termina siendo nuestro ahorro para el año que viene”, sostuvo Javier Vivas, propietario de Lulú Indumentaria en Miguel Lanús.
Agregó que “se siente el aumento, nos dicen los proveedores que hay faltante”, y a su vez relató que “tenemos que trasladar los aumentos, todos los meses hay aumentos”.
Señaló que para acomodarse “tratamos de buscar promociones con tarjetas, con los bancos… siempre aceptamos las promociones” y marcó la realidad al sostener que “tenemos que vender y los empleados tenemos familia y tratamos de sostener la venta”.
Indicó que “bajó la venta, camina mucho la gente y consulta mucho… ahora tenemos el cambio de temporada, la gente va preguntando y va comprando poco”.
Acto seguido fue elocuente, al manifestar que “en otro momento se podía hacer liquidaciones, ahora no nos dan los márgenes, lo que es básico lo guardás, ahora termina siendo nuestro ahorro guardar un poco de ropa para arrancar la temporada siguiente”.
Vivas contó que hace 16 años está con el comercio y que “siempre la estamos remando, buscamos la forma para tratar de estirar, nunca estuvimos holgados en estos años, puedo decir desde mi experiencia”.
Por último puntualizó que “se siente (la suba), todos los meses sube un poquito, no es que de un día para el otro sube un 100%”.