No es raro ver a los ministros de la provincia estar cerca de la gente. Sin embargo, el caso de Facundo López Sartori es llamativo, ya que se comenta que su oficina principal está en la ruta.
El actual titular de Agro de la Provincia es uno de los dirigentes con más kilómetros recorridos en pocos meses. Es que López Sartori decidió estar cerca de las chacras, de la gente, palpar el Misiones profundo.
Alguna vez se escuchó decir que Hugo Passalacqua es un diputado de a pie; prácticamente en la misma sintonía se puede ubicar a López Sartori, a quien se lo podría considerar un ministro de alpargata, atajos, picadas y trillos.
Pasaron unos años cuando, desde un espacio, transmitía sus ideas, en esa ocasión ligadas a la preservación y cuidado del medio ambiente. Sus ganas de transmitir, ayudar y ponerse al servicio de la sociedad lo catapultaron al voto popular, desde un lugar que forjó con un nutrido grupo de jóvenes.
Por ello no causó sorpresa su arribo a la presidencia del Concejo Deliberante, su estilo descontracturado y tener la agenda libre siempre para cuando la causa lo necesite.
Esa conducta simple llegó de inmediato al que confió en él. Y eso lo entendió rápidamente cuando asumió el compromiso de tomar las riendas de la cartera de Agro. Sartori no se mostró dubitativo, al contrario: tomó las riendas desde el vamos, trazó agenda, compartió ideas, las coptó de sus allegados y se lanzó de lleno a la cancha.
Hoy no ve más allá que el día a día. En tiempos en que hay que arremangarse, se ubica primero en la fila. Y eso es prioridad del misionerismo, estar cerca de la gente. Tan simple, aunque a veces parezca que pasa desapercibido.