El director de Narcocriminalidad de la Policía Federal Argentina aseguró este lunes que, si bien el capo narco Lindor Alvarado pensó que la fuga en helicóptero del penal de Ezeiza que pretendió llevar a cabo el viernes último “era posible”, las condiciones de seguridad que cuenta la Unidad Penitenciaria lo hubiese impedido, y afirmó que el acusado ya fue trasladado a “otro módulo” carcelario con mayores medidas de seguridad.
Se trata del comisario inspector Guillermo Cidre, jefe de Narcocriminalidad de la PFA, quien explicó en declaraciones radiales que Lindor Alvarado “venía pensando ejecutar un plan de fuga desde hace aproximadamente seis meses”, y dijo que el capo narco “evidentemente pensó que eso era posible”.
Fuentes judiciales, en tanto, confirmaron a Télam que Alvarado fue indagado este lunes por el delito de “evasión en grado de tentativa” por el juez federal de La Plata que tiene a su cargo la causa, Ernesto Kreplak, y negó haber participado de los hechos.
Por su parte, el jefe policial Cidre brindó detalles del plan y confirmó que dentro de la estructura para llevar a cabo el rescate del capo narco se contempló la compra del helicóptero Robinson 44 Raven importado desde Paraguay, el ploteo de la aeronave, el pago a un piloto experimentado y la participación de otras personas que lo esperarían en las afueras.
El hecho fue descubierto el pasado viernes, cuando los investigadores de la Policía Federal frustraron el intento de fuga tras una investigación que había comenzado a principios de este mes.