Federico Rébola, el fiscal que investiga el ataque a tiros contra el supermercado de la familia de Antonela Roccuzzo, dijo que, hasta el momento, no hay indicios de intimidación o exigencia alguna hacia los dueños del comercio y señaló que, a su entender, el lugar elegido por los autores de la balacera no fue causal, ya que los autores persiguieron la gran repercusión que causó el hecho.
“Claramente, el primer objetivo de los que hicieron esto fue que se enterara todo el mundo. Buscaron el impacto público. No hay nada que indique que querían intimidar o exigir algo a la familia Roccuzzo. Utilizaron algo próximo a Lionel Messi para asegurarse una gran difusión. Y, con eso, el mensaje le llegó a todo el mundo”, sostuvo en declaraciones al diario La Capital de Rosario.