El escándalo desatado en el colegio Roque González de Posadas sigue en el foco de la opinión pública. Esta mañana el juez de menores César Jiménez se hizo presente en el establecimiento y deslizó la importancia de la Educación Sexual Integral (ESI); a todo esto, desde la parte directiva del colegio, el sacerdote Juan Rajimón afirmó de manera llamativa a primera hora que “desconocía” cómo estaba el aula hoy.
Casi en simultáneo, los alumnos se organizaron para una nueva protesta, frente al colegio al mediodía y a través de un documento exigieron medidas después de las denuncias de abuso sexual por parte de alumnos de 2 año que se conocieron el jueves último. En el medio, aún hay sensaciones difíciles de digerir por parte de las alumnas que fueron víctimas y las demás adolescentes que sienten temor.
Dos estudiantes dialogaron con Todo puedo pasar por Circus 104.9 Al ser menores, se las distinguió como A y B desde el inicio fueron categóricas. “La verdad estamos muy nerviosas, también un poco inseguras” por este momento, confiaron.
Respecto de cómo se dieron los hechos que derivaron en las denuncias ante autoridades de la escuela y en la Policía, remarcaron que “algunos chicos de segundo tocaban partes íntimas de sus compañeras sin consentimiento, le sacaban fotos debajo de la pollera cuando se paraban, cosas inadecuadas”.
Recordaron que las damnificadas hicieron la denuncia al colegio y “no tuvieron respuesta de las autoridades” y sobre la sentada que ocurrió al mediodía, apuntaron que el objetivo fue “hacernos escuchar un poco y que se tomen cartas en el asunto”.
Resaltaron que este tipo de abusos comenzaron “desde hace unos cuantos meses”, que “por suerte no tenemos ningún tipo de relación con los chicos” sindicados como abusadores y que la tibia respuesta de Rajimón y los demás directivos fue que “iban a hacer lo que estaba a su alcance”.
“Mucha gente se puso del lado de los chicos de segundo y no querían apoyar”, lamentaron las jóvenes y agregaron que “la mayoría de las chicas acosadas fueron las del curso”.