Luego de la polémica por las declaraciones del diputado libertario Alberto Benegas Lynch, un gran número de voces ligadas a la educación salieron al cruce. Éste había dicho que los padres podrían prescindir de la educación y que los hijos trabajen con ellos, lo que generó contraataques, entre ellos el de la ministra de Capital Humano Sandra Pettovello.
También en Misiones hubo fuertes reflexiones, como el caso de Mariana Grandjean, licenciada en Educación y quien se desempeña en la subsecretaría de Educación Disruptiva.
En diálogo con Circus, apuntó que “hablar de esto a esta altura es un poco fuera de lo histórico, no lo entendemos. Todos los que entienden de esto salieron a repudiar porque hablamos de que necesitamos profundizar el modelo educativo, qué necesitan los niños y adolescentes para enfrentar el futuro que nos preocupa y ocupa”.
Apuntó que en las declaraciones del legislador “no hablamos de trabajo y educación, sino que fueron o educación” y proyectó que el desafío es “cómo pensamos a esta generación para los trabajos que vendrán”. En esa línea, agregó que “no sabemos cómo va a ser, con la IA, la robótica, qué van a necesitar estos niños, jóvenes, hasta los que ingresan a la universidad”
Por último sugirió: “No hay libertad sin desarrollo humano y el desarrollo viene de una formación integral”.
A su turno, Rossana Franco, de la Defensoría del Niño, repasó que esas declaraciones “lo hablamos con las defensorías de todo el país” y que generan “preocupación”.
Marcó que Benegas Lynch “se olvida de varias leyes, porque los niños tienen derechos a la educación y de gozar de una vida digna y libre, como está en la declaración de los derechos humanos y en la convención de niños y adolescentes”.
Subrayó que “los Estados deben garantizar la educación, como así el esparcimiento y el juego”.