El fin de semana el río Paraná fue epicentro de un festival de dorados y surubíes, fenómeno aprovechado por seudo pescadores deportivos que posaron orgullosos con sus piezas con la costa argentina de fondo.
Cientos de personas a bordo de embarcaciones que zarparon desde el Paraguay se concentraron en la zona de Puerto Corazón, aguas arriba de Itatí, masacrando todo a su paso en una cancha de pesca a de menos de 200 metros cuadrados, amedrentando además a los inspectores de la Dirección de Recursos Naturales.
La postal se repitió durante toda la semana y exigió un fuerte despliegue de Prefectura Naval Argentina para evitar la transgresión fronteriza.
Se trata de potentes embarcaciones cuyos propietarios serían brasileros, según contaron a La Dos pescadores deportivos argentinos. Otras fuentes consultadas consignaron que se trata de paraguayos residentes en Ciudad del Este que bajan sus lanchas en Corateí, pocos kilómetros de Itá Ibaté, y luego navegan hasta la cancha donde se encontraba este cardumen.
