El dólar y sus vaivenes marcan el termómetro hoy en día en el país. Sobre ello Gerardo Alonso Schwarz, economista y al frente de la Fundación Mediterránea en la provincia dialogó sobre la coyuntura en el país y analizó que si bien la actual ministra de Economía Silvina Batakis destacó que hay que reducir el gasto, el anuncio fue liviano debido a que no saben cuáles con las medidas más fuertes.
Por otro lado, en diálogo con La Primera Mañana de Circus, analizó qué decisión es conveniente a la hora de darle destino a los pesos.
“(Batakis) cree en el equilibrio fiscal y estamos de acuerdo pero no dio detalles de cómo lo va a cumplir”, como “qué partidas se recortarán, si piensa en algún impuesto”, señaló el economista y mencionó que puede haber novedades tras la gira que realiza por Estados Unidos.
Luego, definió como “tibia” la posibilidad de que no haya nuevas contrataciones del Estado, porque si bien es una buena señal es insuficiente.
Sobre los tipos de dólares que hay en el país, subrayó que el blue “es un mercado pequeño” pero “es sensible a la incertidumbre y al estado de ánimo de la población”. “Cualquier nivel de nerviosismo, la gente se refugia en el dólar”, resaltó. Y es importante decirlo, “durante los días hábiles de junio, hubo un promedio de 350 mil personas que compró dólares, que entraron a sus home banking y compraron los 200 dólares”. Apuntó que son personas distintas, “pequeños ahorristas” y por ello el dólar blue muestra esa volatilidad. Avisó igual que seguro “el blue tendrá algún retroceso”.
La gran pregunta es, ¿qué hacer con los pesos ahorrados? “La respuesta no es sencilla”, precisó Alonso Schwarz depende cuál es el monto; en segundo lugar, cuándo voy a necesitar ese dinero y en tercer lugar, cuánto quiero arriesgar. El riesgo cero no existe, por ejemplo es menos riesgoso el plazo fijo UVA, ahí mantengo el poder de compra que deposité hoy; después puedo tener un deseo de arriesgar y podemos hablar de acciones, entre otras, o bonos. Hay muchas opciones”
Y para el pequeño consumidor, “si sé que voy a necesitar determinado producto, una decisión razonable es adelantar esa decisión de consumo, por ejemplo cambiar la computadora o la impresora”. “Es adelantarme a la inflación de los próximos meses”, cerró.