El presidente Alberto Fernández pidió la renuncia del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), el uruguayo Luis Almagro, al sostener que “la OEA, si quiere ser respetada y volver a ser la plataforma política regional para la cual fue creada, debe ser reestructurada removiendo de inmediato a quienes la conducen”.
“En esta Cumbre debemos analizar el presente y proyectar el mañana en pos de una reconstrucción creativa del multilateralismo”, subrayó Fernández en su alocución en el Convention Center de la ciudad estadounidense de Los Ángeles, al disertar en la IX Cumbre de las Américas.
Esas palabras fueron señaladas antes de dirigirse al presidente estadounidense Joseph Biden, a quien le pidió una reformulación de la política de su país hacia América Latina y el Caribe.
“Estoy seguro de que es momento de abrirse de modo fraterno en pos de favorecer intereses comunes”, propuso el jefe de Estado y, al dirigirse al propio Biden le recordó que “los años previos a su llegada al Gobierno de los Estados Unidos de América estuvieron signados por una política inmensamente dañina para nuestra región desplegada por la administración que lo precedió”, en referencia a la gestión de Donald Trump.
“Es hora de que esas políticas cambien y los daños se reparen”, reafirmó el mandatario argentino y cuestionó que “se ha utilizado a la OEA como un gendarme que facilitó un golpe de estado en Bolivia”.
Además, lamentó que en el gobierno republicano estadounidense se hayan “desbaratado las acciones de acercamiento a Cuba, en las que el Papa Francisco medió, que habían significado avances logrados por la administración de Barack Obama, mientras usted era vicepresidente”, resaltó en otro párrafo dirigido a Biden.
En el mismo sentido, remarcó que “la intervención del gobierno de Donald Trump ante el Fondo Monetario Internacional fue decisiva para facilitar un endeudamiento insostenible en favor de un gobierno argentino en decadencia”, por el crédito stand-by otorgado en 2018 a la gestión de Mauricio Macri.