Los especialistas del Instituto de Medicina y Ciencias Forenses (IMCiF) de Chaco que analizaron los huesos hallados en el río Tragadero, en el marco de la búsqueda de Cecilia Strzyzowski, desaparecida desde el 2 de junio en Resistencia, consideraron este lunes que son humanos y se corresponden a falanges de una mano y de un pie, mientras que para los abogados de la querella encabezados por Fernando Burlando efectivamente pertenecen a la joven de 28 años.
“No tengo dudas que son restos óseos de Cecilia. Tienen el mismo aspecto en cuanto a la incineración de las pertenencias que fueron halladas en el mismo lugar, como el dije en forma de cruz”, dijo el letrado a Télam, en referencia a los tres pequeños huesos seccionados que fueron sometidos a incineración y que se corresponden a dos falanges de un pie y una falange de una mano.
De acuerdo al informe de los expertos del Instituto Médico Forense del Poder Judicial de Chaco que fue incorporado al expediente, los restos óseos hallados el 22 de junio pasado tras un rastrillaje realizado en una de las márgenes del Rio Tragadero, lindero a la chanchería del matrimonio de Emerenciano Sena y su esposa Marcela Acuña, son humanos “por sus características anatómicas”.
Según el informe -al que tuvo acceso Télam-, el primero de ellos mide 3,5 centímetros de largo y 0,7 de ancho y se corresponde a una falange de una mano; el segundo 3,5 centímetros de largo y 1,3 de ancho que pertenecen a un dedo del pie; y el tercero de 2,5 centímetros de largo y 2,3 de ancho que “se correspondería a un hueso largo, con uno de sus extremos seccionado, en forma transversal, lo que lo hace estar representado en forma incompleta”.
Este último es “un hueso del metatarso del pie por las características cromáticas. También hace suponer la acción del fuego”, explica el informe.
“No tengo dudas que son restos óseos de Cecilia. Tienen el mismo aspecto en cuanto a la incineración de las pertenencias que fueron halladas en el mismo lugar, como el dije en forma de cruz”, dijo el letrado a Télam, en referencia a los tres pequeños huesos seccionados que fueron hallados tras la indagatoria a la que fue sometido uno de los imputados, Gustavo Obregón.