El flamante ministro de Economía, Sergio Massa, dio precisiones en la tarde de este sábado sobre su hoja de ruta para el ordenamiento fiscal y financiamiento internacional. Según detalló a través de una serie de tuits, entre las medidas reiteró que no habrá más emisión para financiamiento hasta fin de año, como ya se había adelantado, y que el lunes se iniciarán los reintegros al Banco Central de la República Argentina. Además, se refirió a la segmentación de subsidios a las tarifas de energía eléctrica y de gas y adelantó que citó a los responsables de la administración de los ministerios a una reunión pautada para el próximo martes para darles la programación hasta fin de año.
“Ya comunicamos ambas decisiones. No habrá más emisión para financiamiento hasta fin de año y el lunes iniciamos reintegros al BCRA”, comentó. A continuación, compartió una notificación sobre adelantos transitorios para financiamiento del Tesoro Nacional en el que se indica que se detalla que “deberá abstenerse a partir de la presente y hasta nueva indicación, de solicitar adelantos sin perjuicio de los vencimientos operados con anterioridad.
“Empezamos en coordinación con todos los sectores de la administración pública la fijación de topes al ingreso de personal, y a partir del 1° de septiembre debe estar publicada con acceso público cada declaración jurada en la página del Indec”, agregó el funcionario sobre el congelamiento de planta del Estado en todos los sectores de la administración pública.
“Si ahorramos agua y energía y ordenamos el sistema de distribución de subsidios, protegiendo la tarifa social, el Estado se ahorrará 500.000 millones de pesos al año”, indicó también a la hora de dar detalles sobre la segmentación y quita de subsidios.
La expectativa de la nueva conducción económica para los próximos meses es de cierta desaceleración de la actividad económica y, de la mano de esa tendencia, una caída, deseada, en el nivel de importaciones mensuales. Algo que se reforzará con un ajuste fiscal de modo de encarrilar el resultado fiscal a la meta de 2,5% de déficit anual estipulada en el acuerdo firmado en marzo con el Fondo Monetario Internacional.