Aranceles atrasados, pagos prestacionales demorados, menor cantidad de pacientes y el costo de los alquileres son algunos de los motivos por el que cada vez más médicos se suman al cobro de un plus sobre la orden de obra social o prepaga que entrega el paciente. Pese a que la situación no está autorizada en todos los casos, fue advertida en una recorrida de El Territorio por distintos centros de salud privados de Posadas.
El pago adicional que realizan los pacientes ronda los 500 pesos.
“El tema del plus se debe a la distorsión que hay en los bajos honorarios, son paupérrimos”, señaló Luis Flores, presidente del Colegio de Médicos de Misiones.
“Se abrieron los consultorios y los quirófanos, pero se trabaja menos y entonces estamos sufriendo y como hay atraso en el pago de las obras sociales, en dos meses vamos a sufrir más”, proyectó. “El problema es que nos estamos quedando sin trabajo. Hay pacientes que no vienen a consulta -por miedo a contagiarse de Covid-19- y necesitan porque tienen enfermedades crónicas no transmisibles. Así que también estamos preocupados por ellos”, explicó el profesional de la salud. Y agregó que desde la entidad que conduce resolvieron suspender “el pago de la matrícula por algunos meses para no cargarle más al colegiado. Sin embargo, no suspendimos el seguro de praxis médica que el colegio siguió abonando en nombre de los colegas para que no tengan problemas en el futuro”, destacó.
En la misma línea se explayó Ubaldo Astrada, titular del Círculo Médico de Misiones Zona Sur.
“Con respecto a las obras sociales de la seguridad social y algunas otras de origen nacional, tenemos prestaciones de enero que se tendrían que haber cobrado los primeros meses de abril y todavía no se pagaron; prestaciones de febrero que se tendrían que haber cobrado a fines de abril y tampoco se cobraron y las de marzo se tenían que cobrar los primeros días de junio y aún no se cobraron”, detalló Astrada.
“El panorama sigue siendo problemático, dado que sumado a la ausencia casi de facturaciones, porque los consultorios estuvieron cerrados dos meses, sólo se atendieron algunos controles necesarios o de embarazadas, seguimos con un déficit en los ingresos que lentamente dentro de los protocolos de asistencia se van recuperando”, dijo.
Y coincidió con Flores: “Una característica que realmente preocupa es que también hay una ausencia de pacientes por el temor del contagio y posponen controles necesarios de patologías crónicas, como diabetes e hipertensión, y llegan a tener procesos agudos por no acudir a su atención. Así tenemos pacientes que terminaron en una terapia”.
Situación no excluyente
La situación no es exclusiva de los médicos ni excluye a otros profesionales de la salud. Esta semana,a través de un comunicado publicado en este medio, el Colegio de Bioquímicos de Misiones informó que se comenzará a cobrar un valor adicional a los pacientes para hacerles frente a los gastos de reactivos que necesitan para poder realizar su trabajo diario. Y expresaron que al menos 15 obras sociales tienen demora en los pagos, algunas de las que adeudan desde diciembre de 2019.
“Pedimos también la recomposición de los aranceles porque no podemos seguir trabajando con los mismos de antes de la pandemia, porque los reactivos están dolarizados”, explicó la bioquímica Juana Lorenzo.
“No queremos ningún conflicto con la obra social, hemos intentado de muchas maneras no cobrarle al paciente y resolver el problema insistiendo y pidiendo a la obra social, pero como no obtuvimos respuestas, no nos quedó otra. Reivindicamos la posición del bioquímico dentro del sistema de salud, entonces no podemos cortar el servicio por una cuestión humanitaria, pero necesitamos pagar las cosas, además también tenemos empleados”, cerró Lorenzo.