El trabajo articulado entre colonos y efectivos de la Unidad Regional VII en campos de la localidad de San José se evidenció en las últimas horas, tras la detención de un hombre de 23 años acusado del robo y faenado de un toro de raza Brangus de unos 800 kilos que estaba valuado en unos 2 millones de pesos.
Tras un allanamiento ordenado por el Juzgado de instrucción 4, los investigadores de la Policía detuvieron a uno de los principales cabecillas de una gavilla de ladrones de vacas y toros en campos de San José y Apóstoles.
El procedimiento fue realizado en una propiedad ubicada sobre la ruta provincial 1, en donde se secuestraron cuchillos, chairas y ganchos para carnear los animales, además de unos 25 kilos de carne de toro que fue faenado días atrás y que estaban en un freezer.
Además del presunto cuatrero, fueron demorados otras dos personas, quienes fueron supeditas pero notificadas de la causa. Asimismo, en un aljibe de agua de unos 8 metros de profundidad, ubicado en la propiedad de la madre del implicado, fueron incautados restos del toro colorado. Unos 70 kilos de carne que estaban atados con una frazada y sumergidos en el fondo del pozo.
A estos procedimientos también se le suman otros 50 kilos de carne que fueron secuestrados la noche anterior en una vivienda del barrio San Martín, la que incluso fue allanada por la Comisaría 1ª de Apóstoles.