El grupo terrorista Estado Islámico (Isis) publicó en las últimas horas una imagen de los cuatro presuntos responsables del atentado perpetrado este viernes contra una sala de conciertos a las afueras de Moscú, donde hasta el momento se contabilizaron 143 víctimas.
La fotografía fue difundida por la agencia Amaq, canal propagandístico de la organización. Allí figuran cuatro personas con media cara tapada, gorra y los ojos pixelados delante de una gran bandera del Estado Islámico.
Según notificó Amaq, tres de estos supuestos atacantes “comenzaron a disparar contra la multitud” en la sala de conciertos Crocus City Hall de la ciudad de Krasnogorsk, en tanto que el cuarto inició el fuego en las instalaciones con “bombas incendiarias” que habían sido preparadas de antemano.
También sumaron otros escabrosos detalles, agregando que en la matanza se emplearon ametralladoras, una pistola, bombas incendiarias y cuchillos que se utilizaron para “degollar a varios dentro de la sala y en los pasillos”, mientras que indicó que los supuestos yihadistas apuntaron a la cabeza de los asistentes al evento.
Desde Amaq celebraron que el atentado resultara en “un número infinito de víctimas” y calculó en 300 el número de muertos y heridos, al tiempo que indicó que el atentado fue efectuado “en el contexto normal de guerra entre el Estado Islámico y los países que luchan contra el islam”.
Las autoridades del Kremlin indicaron que la causa de la muerte de los asistentes al concierto en el que se produjo la tragedia fue por heridas de bala y asfixia producida por el humo del incendio que provocaron los terroristas.
Acto terrorista. El recientemente reelecto presidente de Rusia, Vladimir Putin, calificó este sábado de “acto terrorista salvaje” el atentado de la víspera y anunció que el domingo será día de luto nacional. En una alocución en televisión, el jefe de Estado afirmó que los cuatro atacantes detenidos habían intentado huir a Ucrania y prometió que todos los responsables serán “castigados”. En el amanecer de este sábado se formaron colas en los centros de donación de sangre de Moscú, cuando los conmocionados residentes de la capital mostraron solidaridad con las víctimas del ataque al Ayuntamiento de Crocus.