Tensa calma se vive en el reclamo de los taxistas en el centro posadeño. El foco está puesto en la regulación de las licencias que resolvió el Concejo Deliberante a través de una ordenanza, en la cual estableció que éstas son intransferibles. A partir de allí los conductores levantaron la voz, cortaron las calles del centro capitalino y exigieron dialogar con el intendente Leonardo Stelatto.
Esa reunión llegó y duró por espacio de dos horas y media. De un lado el Ejecutivo; del otro la mayoría del integrantes de la Asociación de Propietarios de Taxis. El planteo de estos últimos tuvo que ver con la transferencia de las licencias y el pago de un canon anual, que también fue establecido en la ordenanza, equivalente a litros de nafta super (el monto promedio alcanza los 4000 pesos).
El municipio se mostró firme en lo determinado en la ordenanza, por lo que no hubo intención de modificar lo aprobado y dio señales de que lo pensaba reglamentar. Del lado de los taxistas, la postura también fue inamovible en cuanto a sus requerimientos.
Conclusión: no hubo coincidencias y el reclamo de los taxistas se extendió hasta este martes, mientras de un lado y del otro se tejen estrategias para ver si se llega a buen puerto. Es que en el medio quedan los ciudadanos que nada tienen que ver en esta puja y se vieron perjudicados.
Por caso, algunos accesos al centro hasta la mañana de este martes permanecían cortados, por lo que los colectivos debían abordar otro recorrido.
¿Hay acuerdo? Casi a media mañana de este martes tomó fuerza que habría un principio de acuerdo. Todo se cocinaba a fuego lento.
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