Faruk Jalaf, presidente de la Cámara de Estaciones de Servicio y Afines del Nordeste (Cesane), se refirió a la medida de YPF de subir el costo de combustibles –y también de limitar la venta- para los extranjeros a la que calificó de “ingenua”. Además aclaró que el faltante del producto ya ocurría antes que se abran las fronteras por lo que el problema no es de ahora.
“Esta medida se implementa desde el jueves en Posadas y viernes en ciudades fronterizas, es exclusiva de YPF, las otras no han adherido y les trasladamos el cupo a nuestros clientes de Brasl y Paraguay”, remarcó Jalaf a La Mañana de Circus.
Apuntó que “nunca solucionamos los problemas, los pateamos para adelante” y que “el problema es proveer de más combustible a Misiones porque estamos rodeada de países vecinos”. Señaló que “es normal y lógico que exista esto, no solamente con los combustibles, sino con cualquier producto cuando está más barato en un lugar. Ahora ocurre con los combusibles porque está muy barato comparando con los países vecinos que tienen el doble del precio”.
Se encargó de aclarar que no quiere que “aumenten el combustible”, sólo “planteamos que nuestra moneda se devalúa y al vecino le sale mucho más barato comprar acá. Nunca antes nos dijeron en Brasil o Paraguay ‘tienen que pagar más caro’”. Por ello, consideró que “estamos creando una situación incorrecta que podríamos usarlo como el kiosquero con el cigarrillo. No le da ganancias pero vende cualquier otra cosa y tenemos que aprovechar esta migración, que no se diluya con el cliente. Es una medida ingenua”.
También agregó que el tercer motivo que afecta es el hecho de que las YPF “van a vender menos” y se preguntó qué pretende la petrolera estatal: “No proveerle tanto combustible” a las estaciones con las que trabaja. Como consecuencia “a las otras marcas se les va a agotar antes, y vamos a tener problemas peores”.
Jalaf aclaró que los cupos son de cada estación, que “le echamos la culpa a los extranjeros”, pero “ya faltaba combustible antes que se abran la frontera” y lamentó que “se toman las decisiones sentados en un escritorio en Buenos Aires”.
Agregó que esta medida no es para todas las estaciones y que en el caso de YPF “todo está digitado desde Buenos Aires, entre ellos el precio”.